Pentecostés describe la fiesta del quincuagésimo día después de la Pascua (Domingo de Resurrección) y que pone término al tiempo pascual.
Durante Pentecostés se celebra el descenso del Espiritu Santo y el inicio de las actividades de la Iglesia. Por ello también se le conoce como la celebración del Espíritu Santo. En la liturgia católica es la fiesta más importante después de la Pascua y Navidad. La liturgia incluye la secuencia medieval Veni Sancte Spiritus.
En las narraciones sobre Pentecostés de Hechos de los Apóstoles (2,1 – 41) se le adjudica al Espíritu Santo, en congruencia con el Antiguo Testamento, características milagrosas (carismas): él ofrece valentía y libertad, posibilita la comprensión y fortifica una comunidad universal